La soledad altera el cerebro
Un estudio realizado en ratones demuestra que el aislamiento social disminuye una región cerebral fundamental en la memoria y el aprendizaje
La soledad prolongada
en la edad adulta produce alteraciones cerebrales y un déficit de
aprendizaje. Así lo han comprobado en unos ratones de laboratorio
investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia
(UNED) y la de Murcia.
Según los resultados publicados en la revista Neurobiology
of Learning and Memory, este aislamiento social provocó en los roedores
una reducción del volumen del hipocampo, una región del cerebro fundamental para el aprendizaje y la memoria.
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores
utilizaron doce ejemplares hembra de entre 39 y 44 meses de degús
(Octodon degus), un tipo de roedor que tiene "un comportamiento muy
social", ha detallado César Venero, del departamento Psicobiología de la
UNED y autor principal del trabajo.
La mitad de las degús fueron separadas en un grupo,
mientras que las otras seis no tuvieron contacto físico entre ellas
durante un período de seis meses y medio. A todas se les realizaron
pruebas de aprendizaje y memoria y, una vez fallecidas, se estudiaron
sus cerebros morfológica y bioquímicamente.
Este análisis reveló que el aislamiento produjo una
reducción del volumen del hipocampo y en esta región un descenso en la
molécula PSA-NCAM. "La molécula NCAM facilita la formación y estabilidad
de los contactos entre neuronas -sinapsis- y, por tanto, modula la
actividad neuronal", ha relatado Venero.
La PSA-NCAM es una variante de esta molécula que modula su
capacidad para establecer nuevos contactos entre neuronas o para
fortalecer o debilitar los ya existentes, lo que supone la base de los
procesos de aprendizaje y memoria.
Aunque las conclusiones no se pueden extrapolar al ser
humano, los investigadores sugieren algunos posibles paralelismos. "Esta
investigación podría indicar que las relaciones sociales de las
personas, sobre todo mayores, posiblemente representan un factor
importante a tener en cuenta para que nuestro cerebro se mantenga sano y
que la función cognitiva no se deteriore o lo haga más despacio cuando
envejecemos", explica el científico de la UNED.
No hay comentarios:
Publicar un comentario