La escritura más antigua de Iberia puede estar en..
En el Museo
Arqueológico de Montoro (Córdoba) se conserva una estela de piedra con
extraños caracteres. Ahora un equipo de científicos españoles y
británicos ha comprobado que sus grafemas son compatibles con las
escrituras ibéricas más antiguas conocidas y con otras de origen
oriental. Se trata de una inscripción monumental que podría ser la más
antigua de la península ibérica.
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La estela de Montoro apareció en esta localidad cordobesa, en superficie y fuera de contexto arqueológico de ningún tipo. / US
Un grupo de expertos de las universidades
de Sevilla, Granada, Cardiff y Southampton y del CSIC ha establecido que
los signos descubiertos en la estela de Montoro (Córdoba) podrían ser
la escritura más antigua conocida en Iberia. Estos signos son
compatibles con las escrituras ibéricas más antiguas conocidas, como la
levantina, la tartésica, y la meridional, pero también con otras
orientales, como la fenicia, la protosinaítica, la protocananea y la
sudarábiga.
El estudio concluye, sin
embargo, que los signos presentes en la estela no tienen sentido en su
conjunto dentro de ninguno de estos ‘alfabetos’ tempranos. Por tanto,
los investigadores aseguran que el autor o autores de la monumental
estela de Montoro utilizaron signos que no tienen coherencia como
sistema de escritura en sí, sino que parecen haber sido usados de una
manera peculiarmente selectiva. “Esto constituye en sí mismo una
situación extraordinaria, pues sería como si hoy día encontrásemos una
inscripción con signos de los alfabetos latino, cirílico y chino
combinados”, explica el profesor de la Universidad de Sevilla (US)
Leonardo García Sanjuán.
En el trabajo, publicado en la revista Antiquity,
los expertos señalan dos posibles explicaciones para esta extraña
combinación de motivos. Por un lado, se piensa que en algún momento
indeterminado al comienzo de los contactos con los navegantes orientales
de sociedades literarias que frecuentaron el sur de España, algunos
sujetos de las poblaciones locales del valle del Guadalquivir, que eran
ágrafas (no usaban la escritura), fascinados por el poder de la
escritura, hicieran un monumento gráfico donde representaron signos que
no podían leer pero que ellos asociaban a sociedades tecnológicamente
más desarrolladas, distantes y exóticas. Esta hipótesis tendría mayor
verosimilitud si la estela se datase en la fase inicial de la Edad del
Hierro, cuestión que no ha podido ser establecida con certeza.
Por
otro lado, si la estela correspondiese a una fase más avanzada de la
Edad del Hierro se baraja la posibilidad de que quienes grabaron la
estela de Montoro sí conociesen y entendiesen el significado de los
signos que estaban reproduciendo, pero que, deliberadamente, los usasen
de forma no gramaticalmente significativa. En esta segunda hipótesis los
signos habrían sido utilizados no como parte de unas ‘frases’
comprensibles, sino como códigos que designaban alguna realidad. La
estela de Montoro podría haber designado grupos humanos (clanes, tribus,
ciudades), unidades militares o algún otro tipo de colectivo o realidad
social.
Los orígenes de la escritura en la península ibérica
“En
uno u otro caso, lo que sí podemos afirmar es que la estela de Montoro
ofrece nuevas evidencias para entender los orígenes de la escritura en
la península ibérica, sugiriendo que las pautas de incorporación y uso
iniciales de esta compleja tecnología en un territorio poblado de
sociedades ágrafas fueron complejas”, comenta el profesor García
Sanjuán.
Las prospecciones geofísicas
mediante magnetometría llevadas a cabo en el lugar donde se halló la
estela sugieren la existencia de un edificio o recinto de planta
rectangular y grandes dimensiones. El siguiente paso sería tratar de
aclarar qué uso tenía esta construcción y así fechar la estela con más
precisión, mediante dataciones radiocarbónicas.
En la estela se han identificado 31 motivos gráficos grabados, y 21 podrían ser posibles signos de escritura
Las estelas (piedras de gran tamaño grabadas o
pintadas con diversos motivos gráficos) constituyeron, en la Prehistoria
reciente, la Protohistoria y la Antigüedad, elementos conmemorativos y
monumentales análogos a las estatuas.
La de
Montoro tiene unas dimensiones de 1,5 m de alto, 0,85 m de anchura
máxima y 0,31 m de espesor máximo. Apareció en las cercanías de la finca
conocida como Torre Villaverde, en superficie y fuera de contexto
arqueológico de ningún tipo. Actualmente se conserva en el museo
arqueológico de la localidad cordobesa.
Geológicamente
se talló en un bloque de roca subarcosa de origen sedimentario
detrítico disponible en las proximidades de Montoro. Su estado de
conservación es bastante bueno y llama poderosamente la atención la
ausencia de líquenes y evidencias de desgaste por agua en la superficie
del anverso y los laterales.
Preservada en un edificio o bajo tierra
Esto
ha llevado al equipo investigador a deducir que la pieza pudo haber
estado originalmente protegida en un edificio, a salvo de la acción de
los elementos, o bien que estuvo poco tiempo en uso antes de quedar
enterrada, o ambos. Además, cabe pensar que el lugar del hallazgo
probablemente no estaba lejos de su instalación original, pues no hay
evidencias de desgaste por rodamiento ni por reutilización.
En
la estela se han identificado 31 motivos gráficos grabados. Algunos de
estos motivos son muy someros y por tanto difíciles de apreciar con el
ojo desnudo, por lo que su reproducción digital ha sido de gran
importancia. Según el análisis gráfico y epigráfico combinado realizado
por Marta Díaz-Guardamino y Juan Pablo Vita Barra, del Grupo de Investigación ATLAS de
la US y del CSIC, respectivamente, 21 de estos motivos gráficos podrían
ser posibles signos de escritura, aunque de éstos sólo 13 son
susceptibles de ser interpretados como grafemas.
El
grupo ATLAS se encuentra actualmente desarrollando una línea de
investigación de estelas de la Edad del Bronce y la Edad del Hierro,
incluyendo algunas nuevas como las halladas en Almadén de la Plata y
Mirasiviene (Sevilla) y la revisión de estelas ya conocidas como las de
Almargen (Málaga) y Setefilla (Sevilla).
Referencia bibliográfica:
García
Sanjuán, Leonardo; Díaz-Guardamino, Marta; Wheatley, David W.; Barra,
Juan Pablo Vita; Rodríguez, José Antonio Lozano; Rogerio Candelera,
Miguel A.; Erbez, Ángel Justo; Barker, Dominic S.; Strutt, Kristian D.;
Casado Ariza, Manuel. "The epigraphicstela of Montoro (Córdoba): The earliest monumental script in Iberia?". Antiquity 91 (358): 916-932, agosto de 2017.
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