viernes, 27 de agosto de 2010

POR LA MUERTE DIGNA























Encuesta entre 4 mil profesionales de la salud

Los médicos agnósticos están a favor de la “muerte digna”


Según un estudio realizado en Gran Bretaña, manifiestan dos veces más disposición a acelerar el deceso de pacientes terminales que sus colegas que se declaran “religiosos”.

Los médicos agnósticos están más dispuestos a tomar decisiones que aceleren la muerte de pacientes terminales. Así lo reveló un estudio publicado en la revista médica Journal of Medical Ethics. La encuesta se realizó entre 4000 profesionales británicos de diferentes especialidades. Aquellos que se describieron como “no religiosos” demostraron estar más dispuestos a administrar fuertes sedantes a los enfermos sin posibilidad de recuperación hasta su muerte, conscientes de que esa decisión podía acelerar su final.
Los que se definieron como “extremadamente no religiosos” se mostraron dos veces más propensos a tomar este tipo de decisiones y hasta abiertos a discutir con el paciente y sus familias sobre las preferencias respecto al tratamiento. Al preguntarles si apoyan la muerte asistida y una legislación favorable a la eutanasia, la encuesta demostró que la mayor oposición se encuentra entre los especialistas en cuidados paliativos y entre los facultativos que se declararon “religiosos”.
“Los no creyentes pueden ejercer su autonomía según los dictados de sus convicciones o de su ética particular, en tanto que la persona religiosa por definición encuentra restringida su autonomía y debe acatar en última instancia las leyes de su credo”, destacó Gisela Farias, doctora en Filosofía del Derecho y Bioética y autora del libro Muerte voluntaria. “En ese punto de obediencia a Dios, el creyente no puede ser libre de cometer actos que su religión prohíbe”, agregó la especialista.
Para Carlos Rey, miembro del Consorcio de Médicos Católicos, “por la ley natural, el hombre, religioso o no, tiene derecho a vivir. No tiene derecho a quitarse la vida, ni de asistir al suicidio. Dios creó la vida y sólo él tiene derecho a quitarla. Que un médico administre drogas para matar es abominable.”
No hay eutanasia en el país, aunque Río Negro y Neuquén tienen leyes de “muerte digna”: en esos distritos, quien padece una enfermedad irreversible tiene derecho a rechazar procedimientos quirúrgicos, de hidratación, alimentación y reanimación artificial.<