sábado, 3 de febrero de 2018

FEMINISMO DE BOLUDA




La fuerte demanda de cirugías genitales abre un debate en Brasil

La obsesión por la búsqueda de la belleza
La obsesión por la búsqueda de la belleza Fuente: Archivo

RÍO DE JANEIRO.- En Brasil , un país conocido por su obsesión por la belleza del cuerpo, las mujeres optan cada vez más por una cirugía para mejorar la apariencia de sus genitales, lo que ha provocado un debate sobre la conciencia sexual y la presión por la perfección física.
Los cirujanos plásticos de la mayor economía de América Latina, conocidos por ser pioneros en levantar los glúteos transfiriendo grasa de otras partes del cuerpo a las nalgas, vieron un aumento masivo en la demanda de labioplastias, una cirugía que adelgaza o rellena los labios genitales.
Las mujeres en Brasil que se sometieron a la cirugía aumentaron en un 80% a 23.155 en 2016, la mayor cifra en el mundo, según datos de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS).
Los críticos dicen que la tendencia es una señal preocupante de cómo la pornografía está deformando la percepción femenina de sus cuerpos, ya que una preferencia cultural por la depilación púbica las presiona a asumir nuevas nociones de perfección genital, etiquetadas por algunos como "vaginas de diseño".
Los cirujanos plásticos argumentan en su defensa que es una nueva forma de empoderamiento femenino.
"Las mujeres latinas viven en una cultura machista: él es quien gobierna en la oficina, en el hogar, en la vida sexual. Ahora como mujeres (...) somos líderes en el hogar y en el trabajo y queremos serlo en nuestras vidas sexuales", dijo Lina Triana, una cirujana plástica colombiana que realiza el procedimiento, y que escribió y dio conferencias sobre el tema.
La labioplastia se originó en la década de 1970 como una cirugía reconstructiva para eliminar el exceso de tejido de los labios menores que podría causar dolor durante las relaciones sexuales y la actividad física, dijo Triana.
Pero las técnicas mejoraron y la demanda se disparphoto 13 of 16ó en un 45% en todo el mundo desde 2015 hasta 2016, convirtiéndose en la cirugía estética de más rápido crecimiento, según ISAPS.
La popularidad de los procedimientos genitales fue potenciada por las celebridades, incluida la estadounidense Khloe Kardashian, quien dijo que el láser para estrechar su cavidad vaginal fue un tema de conversación recurrente para sus hermanas Kim y Kourtney después del parto.
En Brasil, la labioplastia aún no es tan popular como la liposucción o los implantes de silicona. Hubo más de 200.000 de cada uno de esos procedimientos en 2016, pero el aumento en la popularidad probablemente no se deba únicamente a las celebridades.
Darlane Andrade, profesora de estudios de género en la Universidad Federal de Bahía, dijo que las mujeres en Brasil enfrentan ideales de belleza cada vez más sexualizados transmitidos a través de la pornografía, junto a una presión por alcanzar la perfección física que es típica del país.
"Es la cultura de la mujer brasileña siendo sexualizada, que debe tener un cuerpo y genitales que sean sexualmente atractivos", dijo Andrade, quien se mostró escéptica respecto a que la popularidad del procedimiento se deba a la creciente liberación femenina.
Si la mujer intenta complacer a un hombre, Andrade pregunta: "¿Qué tipo de empoderamiento es ese?".
Fernanda, una dentista de 33 años que vive en San Pablo, fue operada en julio junto con su hermana gemela Bruna. Dijo que cuando era soltera se sentía cohibida por la apariencia de sus labios genitales y se sintió aliviada de haber podido casarse hace cuatro años.
Pero hace aproximadamente un año su esposo hizo un comentario que la llevó a optar por la cirugía.
"Mi esposo dijo: 'Guau, parece una bolsa que cuelga (...) nunca he visto algo así'", sostuvo Fernanda, quien pidió que se omitiera su apellido. "Me miraba en el espejo y pensaba: 'Realmente se ve como una bolsa'".
Fernanda contó que el procedimiento duró menos de una hora, que el dolor fue mínimo y que está complacida con el resultado.
Fernanda se enteró por primera vez de la cirugía a través de la estrella de televisión brasileña Geisy Arruda, quien en una entrevista en 2012 dijo que sus partes privadas pasaron de ser una "coliflor" a algo más parecido a una rosa a punto de florecer.

El libro de Iria Marañón llega en el momento adecuado: 'Educar en el feminismo' (Plataforma Actual) es el manual con el que esta especialista en educación y edición quiere despertar conciencias sobre la necesidad de añadir la perspectiva de género a la educación que reciben menores y adolescentes. "Ya casi nadie quiere voluntariamente hacer desigualdades pero el constructo social no lo podemos quitar de en medio y a partir de ahí educamos y cometemos errores", dice la autora, que critica un mundo en el que los escaparates, las tiendas de ropas y juguetes, pero también las familias y los colegios, separan a niños y niñas en dos mundos diferentes y desiguales.
Tenemos la sensación de que hoy en día casi nadie diría que no educa en igualdad a sus hijos e hijas, pero ¿es así?
Sí, porque no apreciamos que estamos educando en desigualdad. Hablo de un estudio que se hizo que mostraba, por ejemplo, que los profesores daban más la palabra a los niños en clase que a las niñas. Eso no es algo que se haga de forma voluntaria, sino que es una construcción social. Educamos como nos han educado a nosotros aunque pensemos que no y el sistema patriarcal sigue ahí así que mantenemos los mismos modelos.
Las niñas siguen jugando con princesas, hadas y bailarinas y sus referentes son profesoras, enfermeras o madres y los niños juegan a salir de casa, al barco pirata, con superhéroes que les dicen que pueden cambiar el mundo o con tortugas ninja. Eso parece muy inofensivo pero les está creando dos escenarios completamente diferentes. Creemos que lo estamos haciendo bien pero no nos percatamos del lenguaje inclusivo o de los espacios físicos y verbales que ocupan los niños y usurpan a las niñas y eso incide en que las mujeres nos sintamos ciudadanas de segunda. 
¿Deberían madres y padres reflexionar sobre actos tan normalizados como agujerear las orejas de las niñas para ponerles pendientes?
Claro, algo que parece tan inofensivo en realidad está diciendo cómo tiene que ser una niña, y eso lo va a aprender desde que nace y para el resto de su vida. Lo primero que hacemos es ponerles los pendientes o vestirles de rosa o con lazos y eso le dice a esa niña cuál es su lugar y espacio en esta sociedad, es muy perjudicial.
Antes incluso de haber nacido, el sexo parece marcar las expectativas sobre sobre esa persona que llega...
Exactamente, en el momento en que nos quedamos embarazadas nos preguntan si es niño o niña y ya nos hacemos nuestra película de qué es una niña y qué es un niño y cómo lo vamos a hacer. Obviamente somos distintos pero nunca vamos a saber cuáles son nuestras diferencias hasta que no nos hayan criado en un entorno que no esté impregnado del sistema patriarcal.
Es típico escuchar que hay inclinaciones naturales, que los niños son más movidos y han cogido los coches para jugar sin que nadie les diga nada y que las niñas son más tranquilas y eligen las muñecas. ¿Hasta qué punto no estamos de esa manera reforzando la parte que esperamos de ellos en función de su sexo?
Como decía Kate Millet nunca sabremos hasta qué punto es así mientras no sean educados en igualdad. Yo estoy segura de que sí hay diferencias pero esas diferencias no pueden causar desigualdades sociales. Puede que los niños sean más movidos pero también puede ser que a las niñas se les diga más que se estén quietas o se les coarta más. También hay que pensar por qué nuestro hijo quiere jugar al fútbol. A lo mejor porque ve que todos los niños juegan al fútbol o que su padre insiste en ello o le gusta. A lo mejor cuando tiene un año sin casi influencia le gusta o coge una pelota, pero tenemos que preguntarnos por qué lo mantiene. Si a lo mejor nuestra hija siempre quiere ir de rosa, de bailarina o princesa igual le podemos hacer ver que tiene otras opciones que quizá ella no está viendo porque no se le muestran.
Entonces, para educar en el feminismo, ¿tienen las madres y padres que hacer un trabajo propio de revisión y autocrítica consigo mismos?
Lo primero que tenemos que hacer como madres, padres y educadores es dar ejemplo y empezar a repensar nuestra relación, cómo lo hacemos en casa y qué mensajes estamos transmitiendo en casa. Todos los referentes son importantes y el núcleo familiar es fundamental. Si nuestras hijas e hijos ven en una pareja heterosexual que el padre y la madre con corresponsables del hogar y la crianza ya estarán viendo un modelo que les va a servir para su vida. Si ven una desigualdad que es además la que coincide con la desigualdad que ven en toda la sociedad les va a parecer que ese es el modelo correcto. 
Y en la práctica, ¿cómo se hace todo esto?
Cambio de roles: que sepan que hay muchas formas de ser una niña y de ser un niño, revisar masculinidades y feminidades y el género binario. Intentar usar un lenguaje en el que las niñas también se sientan representadas porque lo que no se nombra no existe. También hay que limitar los espacios que ocupan los niños respecto a las niñas y educarles para que no avasallen. Y a las niñas educarlas para que no cedan espacios propios y para eso es importante educar en la asertividad. Tenemos que darles referencias de mujeres diversas, que vean que somos capaces de hacer de todo y que hay mujeres de todo tipo, que hay pioneras en todos los campos que pueden ser sus referentes. Respetar la diversidad y la diferencia, que vean que ser diferente no es malo y es importante para que se exploren. Que sepan que pueden resolver conflictos negociando para que no utilicen la violencia y aprendan a ceder. 
¿Alguna recomendación específica para los niños?
Con los niños hay que potenciar la sensibilidad, la comunicación, la empatía y la autonomía para que sean ellos mismos los que se ocupan de sus cuidados. Hacerles partícipes de las responsabilidades del hogar y los cuidados, que los niños sean generosos con su tiempo. Que aprendan a ser respetuosos con las mujeres tanto escuchándolas como respetando sus decisiones y sus 'no'.
¿Y para las niñas?
Las niñas tienen que aprender a decir que no, que sean asertivas, que sean valientes; pero no para ir por la calle de noche sin miedo, sino una valentía que implique poder decirle a tu jefe algo con lo que no estás de acuerdo o romper una relación con la que no estén a gusto, y fomentar su liderazgo. 
Entiendo que es algo que tener en cuenta durante toda la crianza, aunque ¿qué hacer en la adolescencia, cuando entra en juego el amor romántico y el sexo?
Hay que empezar antes de la adolescencia a romper los mitos del amor romántico. Que en su propia casa vean que somos personas independientes que nos queremos y tenemos buena relación pero que nadie se mete en el espacio del otro. Y ya en la adolescencia, ser muy críticos cuando vemos una película, una serie o leemos un libro para hacerles críticos con el entorno. 
¿Van algunas prácticas sociales muy arraigadas, como la de obligar a niñas y niños a dar besos, en contra de esos valores de respeto hacia el propio cuerpo y la asertividad?
Tenemos que enseñarles a que son libres con sus propios cuerpos. Cuando son pequeños tienen que saber que con su cuerpo también van a tomar decisiones. No se les puede forzar a dar muestras de cariño si no quieren; ya se les saldrá si les apetece. También hay que hablarles y prevenirlos sobre los abusos sexuales, sin asustarles, con mucha mano izquierda. Hay que decirles que siempre pueden decir que no, incluso a un adulto. Y que ellos tampoco pueden hacer nada con el cuerpo de los demás, que el cuerpo es algo de cada uno y que nadie puede hacerte nada ni tocarte si uno no quiere.
¿Están los colegios preparados para coeducar o más bien al contrario?
No, creo que si lo hay es algo excepcional. No hay como acercarse a un patio escolar para ver que los niños ocupan todo el espacio central y las niñas ocupan los laterales. Y luego fijémonos en los referentes que se ponen en los colegios. 
Y más allá de lo individual, ¿qué puede hacerse desde las políticas públicas para educar desde la igualdad?
Mucho, se puede igualar la baja paternal a la maternal para fomentar la corresponsabilidad desde el principio, que la coeducación se implemente en los colegios por ley de forma transversal, que la educación pública incluya clases sobre afectividad y sexualidad...

¿Por qué los hombres tienen sueño tras el sexo?

La respuesta a esta pregunta, y a muchas otras, está en neurosexualidad, cuyos expertos celebran en febrero su Encuentro Internacional en Madrid
No podría escribir sobre sexualidad sin mencionar la neurociencia. Por supuesto, es necesario conocer y comprender nuestras claves y misterios desde diversos puntos de vista como el biológico, neurológico, psicológico, cultural y espiritual, entre otros, pues en nuestra sexualidad operan y conviven todos ellos. Responder a los porqués no sería posible sin una visión global de lo que supone el fenómeno y la experiencia sexual, física, química, mental y energética.
Pero no seré yo quien ilustre sobre neurosexualidad, a pesar de haber tenido maestros excepcionales al respecto, sino que será uno de ellos quien se encargará de hacerlo en el Encuentro Internacional de NeuroSex Madrid 2018.
Me refiero al pionero de los programas de NeuroSexualidad en castellano, Noel Alicea, quien lleva más de 30 años profundizando en la relación entre química cerebral y sexualidad humana. Siendo experto en neurociencia cognitiva y creador de la denominada Ingeniería CognitivaTM, aplica la neurociencia a la vida cotidiana, donde la sexualidad encuentra su campo de juego, se expresa y desarrolla.

Desde el átomo al orgasmo

Curiosa relación, ¿verdad? "Sin energía no hay orgasmo. Sin átomos no hay energía", contesta Alicea. El experto asegura que entender la sexualidad humana a nivel atómico hoy es posible, gracias a los adelantos de la ciencia y la tecnología. Al igual que comprender la composición atómica de nuestro organismo es el principio de un mundo de revelaciones que culminan en el comportamiento humano.
Anima a hacer uso de la ciencia para alejarse de la ignorancia, de los mitos y supersticiones culturales, porque hoy es posible. "Esto nos llevaría a tener dominio sobre nuestro comportamiento y, por ende, sobre nuestra sexualidad", revela el experto. Mientras en otros animales la sexualidad cumple solo el propósito de la perpetuación de la especie, en el caso do los seres humanos estos son muy diversos.
"Llevaremos a los participantes por una maravilloso viaje a través de la física, la química y la biología, para que ellos mismos puedan optimizar su salud, sexualidad y sabiduría", afirma, siendo esta la base de la neurosexualidad.

Neurosexualidad

"La sexualidad es una puerta de doble vía. Abres en una dirección y vives en un verdadero paraíso. Abres en la otra dirección y vives en un verdadero infierno. ¿Crees que es importante conocer ambas direcciones antes de abrir?" Así me hace saber el doctor cuál es la importancia de la neurosexualidad en nuestra vida.
La vida sexual nos despierta bastantes dudas pero, muchas de ellas, ni siquiera llegamos a despertarlas, pues desconocemos que existan o que puedan afectarnos.
¿Conoces cuál es el mejor estado mental para abordar una relación sexual plenamente satisfactoria?, ¿por qué fase de maduración sexual pasa una persona?, ¿cómo activar las áreas neuronales responsables del bienestar y el placer? Quizá desconozcas los beneficios neurológicos de las prácticas sexuales saludables o de qué manera podemos integrar los sistemas cerebrales del cuerpo para trascender la sexualidad primitiva animal. La neurosexualidad nos lleva a completar el trinomio de las 3S de la Felicidad: Sexo-Salud -Sabiduría.
El doctor Noel Alicea, acompañado por otros expertos, como la doctora Silvia Lugo, bióloga doctorada en Medicina y el doctor en Psiquiatría Johnny Turner, que también desarrollan su labor científica y divulgativa en su sede de Miami, Estados Unidos, nos resolverán estas y muchas otras dudas y curiosidades.

Conciencia con ciencia

La sexualidad consciente no sólo es una moda hoy en día, sino también una necesidad. La práctica del MindfulSexTM o sexualidad consciente, el cual imparto y conozco sus beneficios, se vuelve fundamental tanto en terapia como en la vida diaria. También para resolver las diversas disfunciones sexuales, relacionales y emocionales, de la sociedad de hoy en día, teñida por el devastador estrés, entre otras amenazas.
Tomar conciencia no es más que estar en contacto con nuestros pensamientos, emociones, sensaciones y deseos, pero también ser conscientes de quién somos a nivel biológico, químico, neurológico y energético. Por supuesto, conocer esto, nos acerca más a las personas con quien compartimos nuestra sexualidad, pues funcionan y disfuncionan de manera muy similar a nosotros, en relación a diversos factores como los genéticos, epigenéticos o culturales, entre otros.
La empatía, siendo fundamental para el entendimiento y convivencia, también en el ámbito sexual, incluye entender diversas cuestiones sobre neurosexualidad que, hasta ahora, nadie nos había contado, ni sabían cómo hacerlo.
El doctor Alicea, a quien tendré el honor de acompañar en su visita, nos regala estas cinco preguntas que hoy se pueden responder de manera científica, sencilla y práctica. Conocer las respuestas nos puede ayudar a resolver algunos conflictos personales, de pareja, entendernos mucho más y mejor, y potenciar nuestro placer y satisfacción afectiva y sexual.
  1. El 65% de nuestro organismo esta compuesto de átomos de Oxígeno. Somos seres gaseosos.
  2. ¿Por qué crees que después de un orgasmo sientes tu cuerpo mucho mas liviano?
  3. Algunas son tan sorprendentes como esta. ¿Sabías que las bacterias de nuestro intestino determinan el grado de placer que se obtiene en una relación sexual?
  4. El 10% de nuestro organismo está compuesto de átomos de Hidrógeno, que proviene del sol. El sol es nuestra principal fuente de energía. ¿Por qué crees que a la mayoría de los hombres, después de orgasmar, les da sueño?
  5. Los seres humanos vivimos en una burbuja de Nitrógeno. Siendo el 78% de la masa de aire que nos rodea. El descubrimiento de la molécula compuesta de Nitrógeno y Oxígeno ganó el premio Nobel en 1998. ¿Por qué crees que las mujeres al orgasmar tienden a perder la conciencia momentáneamente?
  6. Y te has parado a pensar, ¿por qué en las relaciones sexuales hay tendencia introducir la lengua en los diferentes orificios de sus compañeros sexuales o parejas?
Cuestiones tan curiosas como las anteriores, son las que nos resolverán en este encuentro internacional sobre neurosexualidad, donde pondrán al alcance de todos, estudiosos del tema o no, todo un mundo de ciencia y sabiduría, desconocido aun por la mayoría.

Neuronas de ansiedad activadas en el hipocampo
Neuronas de ansiedad activadas en el hipocampo - CUMC
ANSIEDAD

Identificadas las neuronas responsables de la ansiedad

El descubrimiento de estas neuronas del hipocampo abre la puerta al desarrollo de nuevos tratamientos para reducir la ansiedad y tratar el trastorno de ansiedad





Como explica René Hen, co-autor de esta investigación publicada en la revista «
Neuron», «hemos encontrado estas neuronas en el cerebro de ratones, si bien es probable que también existan en los humanos. Y las denominamos ‘neuronas de ansiedad’ porque solo se activan cuando los animales se encuentran en lugares y situaciones que son innatamente percibidos como amenazantes. En el caso de un ratón, estos lugares podrían ser un espacio abierto en el que hay una mayor exposición a los depredadores, o una plataforma elevada».La ansiedad se define como la respuesta de anticipación totalmente involuntaria que experimenta el organismo frente a estímulos que, ya sean externos o internos –como sería una mera idea o pensamiento–, son percibidos como amenazantes o peligrosos. En consecuencia, y percibida la amenaza –justificada o injustificada–, el cuerpo se ‘prepara’ para reaccionar y experimentamos unos síntomas muy poco ‘agradables’ –como la sudoración o la taquicardia–. Así, la ansiedad se presenta como una respuesta totalmente natural frente a las situaciones de estrés. Pero, exactamente, ¿dónde se origina esta ansiedad? Pues según un nuevo estudio dirigido por investigadores del Centro Médico de la Universidad de Columbia en Nueva York (EE.UU.), en un grupo de neuronas localizadas en el hipocampo y bautizadas como ‘neuronas de ansiedad’. Un descubrimiento que, según sus autores, puede abrir la puerta al desarrollo de tratamientos para combatir la ansiedad, muy especialmente cuando se dispara hasta el punto de suponer una enfermedad –el consabido ‘trastorno de ansiedad’.

Dejar a un lado los miedos

Sentir ansiedad no es solo normal. También es absolutamente necesario. Y es que esta ansiedad es un mecanismo de alarma para que los animales –incluidos los seres humanos– eviten aquellos comportamientos o situaciones que amenazan su existencia. El problema tiene lugar cuando una persona tiene una percepción desmesurada de las amenazas. Por ejemplo, cuando su cerebro interpreta que caminar entre una multitud tiene el mismo peligro que meterse en una fosa con cocodrilos. Y es que en estos casos, la ansiedad deja de ser una molestia transitoria para convertirse en una enfermedad.


El objetivo del nuevo estudio fue tratar de comprender qué es lo que funciona mal en el trastorno de ansiedad. Y para ello, utilizaron un modelo animal –ratones– para intentar descifrar cómo el cerebro procesa la ansiedad ‘saludable’.

El descubrimiento de las ‘neuronas de ansiedad’ abre la puerta al diseño de nuevos tratamientos frente al trastorno de ansiedad

En este contexto, el hipocampo juega un papel bien conocido en la capacidad cerebral para crear nuevos recuerdos y ayudar a los animales –caso también de los humanos– a navegar a través de entornos complejos. Sin embargo, las evidencias recientes apuntan a que el hipocampo también está implicado en la regulación del estado de ánimo, hasta el punto de que la alteración de la actividad en el ápice ventral de esta región cerebral puede disminuir la ansiedad. Pero aún hay más. También se sabe que el hipocampo envía señales a otras áreas del cerebro –sobre todo a la amígdala y al hipotálamo– implicadas en el control del comportamiento relacionado con la ansiedad. Entonces, ¿es posible que el hipotálamo sea la fuente de esta ansiedad?
Para averiguarlo, los autores insertaron un microscopio en miniatura en el cerebro de un modelo animal –ratones– al que dejaron moverse libremente por el laboratorio. Y lo que vieron es que cuando los animales se encontraban en una situación que les provocaba ansiedad, se activaban un grupo de neuronas específicas en la región ventral del hipocampo. Es más; cuanto mayor era la ansiedad del animal, mayor era la activación de estas neuronas y, por tanto, más intenso era el envío de señales a las regiones cerebrales encargadas de desencadenar los comportamientos asociados a la ansiedad –como sería, por ejemplo, buscar refugio.
Pero, ¿son estas neuronas las verdaderas responsables del control de la ansiedad? Pues sí. los autores emplearon una técnica que, denominada ‘optogenética’, permite controlar la actividad de las neuronas con la emisión de haces de luz. ¿Y qué pasó? Pues que cuando ‘apagaban’ estas neuronas del hipocampo, los animales perdían el miedo y se paseaban por sitios elevados y estrechos y no les importaba permanecer en espacios abiertos a la vista de todos. Por el contrario, cuando estas células eran sobreestimuladas, los ratones se mostraban totalmente temerosos incluso en los lugares que en condiciones normales percibían como totalmente seguros.

Posible tratamiento

En definitiva, el estudio describe el lugar exacto en el que residen las ‘neuronas de ansiedad’. Y como indica Jessica Jiménez, directora de la investigación, «ahora que ya sabemos donde encontrar estas células en el hipocampo, se abren nuevas áreas para la exploración de posibles tratamientos que ni siquiera sabíamos que existían».

Entonces, ¿cuál es el siguiente paso? Pues como concluye René Hen, «estamos analizando si estas neuronas son molecularmente diferentes de otras neuronas. Y si encontramos un receptor específico en las ‘neuronas de ansiedad’ que permitan distinguirlas de sus vecinas, entonces será posible desarrollar un nuevo fármaco para reducir la ansiedad».