domingo, 23 de diciembre de 2012

La mano también evolucionó para dar mejores puñetazos

'Mano térmica de artista' de Lugán
La 'Mano térmica de artista' de Lugán en la exposición en la exposición 'Modelos, estructuras, formas. España 1957-1979' en Sevilla en 2005.
.Esta publicación se hace eco de una nueva teoría acuñada por científicos estadounidenses, que sostienen que las manos cambiaron por la necesidad de formar un puño, que es el método más eficaz para pegar con fuerza sin hacerse daño a uno mismo.
Según David Carrier, de la universidad de Utah, esta necesidad explicaría que las manos del ser humano desarrollaran dedos y palmas cortas junto con un pulgar más fuerte y largo, lo que les permite no solo agarrar cosas pequeñas y realizar actividades delicadas, sino cerrarse en forma de puño.
El papel que la agresión ha desempeñado en nuestra evolución no ha sido adecuadamente apreciado"El papel que la agresión ha desempeñado en nuestra evolución no ha sido adecuadamente apreciado", afirma Carrier, que reconoce que habrá gente "a quien no le gustará esta idea".
Carrier recuerda que el grupo de los grandes primates, a los que pertenecemos las personas, es "relativamente violento y agresivo, con muchas peleas y agresión, comparado con otros mamíferos".
Según estos expertos, la selección natural hizo que sobrevivieran los humanos con manos más aptas para formar el puño, "individuos que podían pegar más fuerte sin dañarse, lo que les hacía más aptos para luchar por sus parejas y, en consecuencia, para reproducirse".
Para probar su teoría, Carrier dirigió un experimento en el que adultos expertos en artes marciales y boxeo tenían que pegar un saco con la mano en diferentes posiciones, con lo que consiguió demostrar que el puño cerrado es más efectivo para propinar un golpe que la palma abierta o medio cerrada.
"Como el experimento demuestra que las proporciones de la mano humana son ventajosas para pegar puñetazos, sugerimos que esas proporciones resultaron en parte de una selección natural para mejorar las aptitudes para la lucha", declara el profesor.
Carrier insiste en que, si el fin hubiera sido solamente la destreza, la mano humana no hubiera necesitado acortar la palma y los dedos, mientras que para formar un puño sí es necesario ese cambio y el crecimiento del pulgar.
Otros argumentos que sustentan su teoría, añade, es que no existe otro primate que pueda formar un puño y que los humanos utilizan el puño cerrado instintivamente como signo de amenaza.
Carrier concluye que la mano representa, más que ningún otro componente de la anatomía, "la identidad del Homo Sapiens", ya que tiene las funciones paradójicas de servir para amenazar, pegar e incluso matar para resolver conflictos" al tiempo que permite "usar herramientas delicadas, tocar música, crear arte y nutrir y expresar emociones e intenciones complejas".

Acidentes com animais peçonhentos aumentam 30% no período de chuvas

Agência Brasil
“No Brasil, a espécie mais comum nos acidentes é a jararaca, em função da quantidade e variedade de espécies que o país tem. Em segundo lugar vem a cascavel. A jararaca causa mais acidentes, mas é a que menos mata, apesar de deixar sequelas às vezes graves. A cascavel, apesar de causar  poucos acidentes, é a que mais mata”, destaca o biólogo e diretor do Museu Biológico do Instituto Butantan, Giuseppe Puorto.  As mortes causadas pela cascavel ocorrem, segundo ele, em função do tipo de ação do veneno, que pode provocar insuficiência renal aguda.
De acordo com o Butantan, em caso de picadas de cobras deve-se, em primeiro lugar, manter a calma, lavar o local da picada apenas com água ou com água e sabão, dar bastante água à vítima para manter a hidratação e procurar o serviço médico o quanto antes. Se possível, deve-se manter erguida a parte atingida.
“Em hipótese alguma, por mais que seja prática comum, deve-se amarrar, cortar, sugar ou colocar qualquer outro tipo de produto sobre o local do acidente, ou beber qualquer outro líquido que não seja água”, diz o biólogo. Também não se deve tentar tocar no animal sem a ajuda de uma pessoa qualificada.
Quanto à ferroada de escorpião, a primeira medida a ser adotada é  colocar compressas de água morna sobre a ferida. O procedimento ajuda a aliviar a dor até a chegada ao serviço de saúde mais próximo. Em caso de picadas de aranhas e queimaduras de taturanas, é importante não mexer no ferimento e procurar atendimento médico imediatamente.
Para evitar os acidentes, o Butantan recomenda manter limpos quintais, jardins e terrenos baldios, não acumulando entulho e lixo doméstico; aparar a grama dos jardins e recolher as folhas caídas; vedar soleiras de portas com saquinhos de areia ou friso de borracha, colocar telas nas janelas, vedar ralos de pia, tanque e ralos de chão com tela ou válvula apropriada.
Também é recomendável colocar o lixo em sacos plásticos, que devem ser mantidos fechados para evitar aparecimento de baratas, moscas e outros insetos, que são o alimento predileto de escorpiões; examinar roupas, calçados, toalhas e roupas de cama antes de usá-las; andar sempre calçado e usar luvas de couro ao trabalhar com material de construção e lenha.
 O Hospital Vital Brazil, do Instituto Butantan, disponibiliza um telefone de orientação em casos de emergência e acidentes com animais peçonhentos. O serviço funciona 24 horas e orienta sobre o local mais próximo para atendimento. O telefone é o (11) 2627-9529. Dicas de prevenção também podem ser encontradas em www.butantan.gov.br.