jueves, 5 de septiembre de 2013

FOTO CENSURADA EN FACEBOOK

yoga breastfeeding mom

OTRO EXITO CIENTIFICO ARGENTINO

El virus del resfrío que puede atacar el cáncer

.
Resfrío (Getty Images)
Un virus que causa resfríos y conjuntivitis podría ayudar a curar el cáncer. (Getty Images)
Curar el cáncer es el sueño de muchos investigadores y en los últimos años se ha ido perfeccionando una técnica que podría revolucionar el tratamiento de esta enfermedad: la viroterapia, el uso de virus modificados genéticamente para que ataquen células tumorales.
La Fundación Instituto Leloir de Argentina anunció recientemente dos avances importantes en este campo. Junto con colegas de Chile, Reino Unido y Estados Unidos, lograron adaptar un virus que causa resfríos y conjuntivitis –el adenovirus- para atacar en forma exitosa el cáncer de piel y páncreas en roedores.
El director del equipo del Leloir, Osvaldo Podhajcer, jefe del Laboratorio de Terapia Molecular y Celular e Investigador Superior del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet), dijo a BBC Mundo que se logró reducir o eliminar los tumores sin dañar otros tejidos.
Esto fue posible porque los científicos modificaron el ADN del virus para que sólo pueda reproducirse en células cancerígenas.
La técnica representa un gran avance respecto a los tratamientos convencionales para el cáncer, como la quimioterapia o la radioterapia, que dejan graves secuelas.
Además, el trabajo podría tener un enorme impacto en la cura del melanoma y el cáncer de páncreas, dos de las enfermedades más letales.
“Estos dos tipos de cáncer son los que tienen menos posibilidades de recibir un tratamiento no quirúrgico”, explicó a BBC Mundo el oncólogo Eduardo Cazap, expresidente de la Unión para el Control del Cáncer Internacional (UICC, según sus siglas en inglés).

Los riesgos de modificar un virus


Cuando se habla de modificar genéticamente un virus hay quienes temen que estos avances científicos supongan un riesgo grande a futuro, por la posibilidad de que provoquen una pandemia.

Tal es la premisa de la película de 2007 “Soy leyenda”, con Will Smith, en el que una científica logra curar el cáncer modificando el virus de la viruela, pero el virus muta, convirtiendo a todos los humanos –menos al personaje de Smith- en zombies.

En este sentido, los expertos del
Instituto Leloir dijeron a BBC Mundo que eligieron trabajar con el adenovirus porque se trata de un virus poco peligroso y muy estable,
lo que descarta cualquier peligro de mutación.
En efecto, Podhajcer explicó que se trabajó con estas dos formas de cáncer porque no tienen tratamiento conocido y además tienen una alta incidencia en la población.

Hitos

El trabajo sobre el cáncer de páncreas se hizo en asociación con dos universidades de Chile, Concepción y Andrés Bello, algo poco frecuente en América Latina.
Los expertos lograron un hito: pudieron compactar el ADN del virus para permitir que se multiplique más.
El estudio fue publicado en la revista Molecular Therapy, de la Asociación Estadounidense de Terapias Celulares y Genéticas.
En tanto, la investigación sobre el cáncer de piel se hizo en conjunto con las universidades de Londres, Birmingham y St. Louis, y allí también se lograron avances novedosos.
“Por primera vez logramos modificar genéticamente un virus para hacer que aproveche las características de las células cancerígenas y las utilice en su contra”, explicó Podhajcer.
Según el experto, esto permitió que el virus actúe con un 40% más de efectividad.
El trabajo fue publicado en The Journal of Investigative Dermatology.

Mucho camino por recorrer

A pesar de la importancia de estos avances, los autores resaltaron que aún es prematuro establecer qué impacto real tendrán en la cura del cáncer.
Melanoma (Getty Images)
El melanoma y el cáncer de páncreas son difíciles de tratar. (Getty Images)
Primero, se deberá realizar toda la etapa de ensayos preclínicos y clínicos, un largo proceso que toma años y requiere de mucha financiación.
Si todo funciona bien, el Instituto Leloir estima que el tratamiento recién estaría disponible en unos cinco años.
Sin embargo, Cazap advierte que muchos hallazgos exitosos en roedores no funcionan en pruebas con humanos.
“El potencial de estos descubrimientos es muy interesante pero hay que ver si funcionan”, afirmó.
Estas dificultades podrían desalentar a quienes esperan ansiosos una cura para el cáncer, pero existe al menos un precedente que permite mantener la esperanza: en 2012 la Unión Europea permitió por primera vez el uso comercial de un tratamiento de viroterapia, algo que podría marcar el camino para los nuevos hallazgos.