Susana Díaz, durante la inauguración de la Feria Internacional del Sector de Frutas y Hortalizas, en Madrid. EFENuestra
señora de los infinitos dominios presupuestarios, la dueña de los
predios fecundos que han dado fama en el orbe a Andalucía, la Reina de la Marisma,
vive días felices entre aceitunas y berries, que son las frutas del
bosque de toda la vida, aunque los empresarios de Huelva ahora usen este
nombre para denominar a las bayas. Por supuesto, Ella está encantada.
Las bayas son deliciosas y los hombres de negocios le demandan, con una
sequía en ciernes, que invierta el dinero (de todos) en infraestructuras
para poder nutrir con el agua (común) sus explotaciones (privadas).
Argumento: la fresa crea mucho empleo and all this stuff.