lunes, 29 de julio de 2013

lopez

LAS MENTIRAS DE LOS LABORATORIOS Y LAS COMPLICIDADES DE LOS MEDICOS PESETEROS

Revuelo en la Asociación Española de Pediatría

  • El 60% de los miembros del comité de lactancia de la AEP dimiten, según un blog
  • El vicepresidente de la asociación habla de elecciones, no de dimisiones
  • Un anuncio de leche artificial en la revista de la AEP, el motivo de conflicto
  • Sus desavenencias también vienen de un artículo sobre el colecho
La noticia la han lanzado varios blogs que, vía internet, se han encargado de difundir al máximo un hecho, cuanto menos, llamativo: "Dimite el 60% de los componentes del Comité de lactancia materna de la Asociación Española de Pediatría".
El motivo de discordia, cuentan, un anuncio publicado en la contraportada de la revista de dicha asociación ('Anales de Pediatría'), que promocionaba una marca específica de leche artificial (Nestlé) destinada a los bebés nacidos por cesárea. Según relata uno de los blogs, "en esta publicidad se da a entender que la fórmula láctea reduce en un 46% el riesgo de infección gastrointestinal en el recién nacido (en este caso por cesárea) [...] Se promueve la lactancia artificial por encima, al parecer, de la posibilidad de la lactancia materna", al menos, cuando plantea esta cuestión: "¿Acaso los bebés por cesárea no tienen derecho a lo mejor?". Por si hiciera falta repetirlo, insisten los expertos del Comité de lactancia, lo mejor para estos pequeños y el resto de los bebés es, sin duda, la leche materna.
Pero esto era sólo la gota que ha colmado un vaso que ya estaba a punto de rebosar. ELMUNDO.es se ha puesto en contacto con varios pediatras de la AEP, entre ellos una de las profesionales que ha renunciado, Maite Hernández, actual coordinadora de la Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia (IHAN). "Llevamos mucho tiempo pidiendo a la junta directiva de la AEP que reconsideren sus relaciones con la industria de la alimentación infantil, especialmente con los fabricantes de leche para lactantes".
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El colecho, otro motivo de discordia

El detonante prioritario de esta situación, apunta el vicepresidente de la AEP, es un artículo que escribieron los expertos del comité de lactancia sobre colecho. Un capítulo que también ha relatado a ELMUNDO.es Maite Hernández. Este artículo apoyaba el colecho para facilitar la lactancia. "Revisamos todos los estudios y novedades y el artículo fue publicado en la Revista de Pediatría de Atención Primaria (perteneciente a la AEP) [...] La web de la AEP también tenía un enlace a este artículo".
Al poco tiempo, un diario nacional se hizo eco de un estudiodifundido por una revista científica ('British Medical Journal' -BMJ-) que concluía que el colecho parecía multiplicar por cinco el riesgo de síndrome de muerte súbita de los menores de tres meses.
Dado que era una de las revisiones más amplias realizadas hasta la fecha, "consultamos con el gabinete jurídico y al entender que el apoyo a esta práctica podía ser causa de demanda, nos recomendaron retirar el enlace de nuestra web [...] No podemos recomendar una práctica que supone un riesgo para la vida del niño, aunque favorezca la lactancia materna", subraya Antonio Nieto.
El problema es que "la junta directiva no confia en nosotros como expertos en estos temas", señala Hernández. Cuando apareció este artículo de 'BMJ' en los medios, "nos ofrecimos para hacer una nueva revisión de la evidencia científica y estudiar bien la del 'BMJ'", pero no esperaron a escuchar "nuestras conclusiones y quitaron el enlace". Lo cierto es que aquella "revisión está basada en muchos trabajos, pero no en los más recientes. Muchos son de hace 20 años". A nivel europeo, añade, ha habido muchas reacciones en contra de la revisión del 'British Medical Journal', precisamente por la metodología empleada. Un ejemplo es el documento publicado por Unicef en Reino Unido.
Este capítulo, junto con su negativa a replantearse la relación de la AEP con las marcas nutricionales ha conseguido que "sintiéramos que no contábamos con la confianza de la actual junta directiva. Nosotros sólo queremos una asociación que confíe en sus expertos y sea respetuosa con el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna, aprobado por la OMS en 1981 y al que España se acoge a través de la ley de aplicación (Real Decreto 867/2008).
Entre otras cuestiones, dicho decreto "prohíbe a los fabricantes o distribuidores de preparados para lactantes proporcionar al público en general, a las mujeres embarazadas, madres o miembros de sus familias [...] muestras ni ningún otro obsequio de promoción, ya sea directa o indirectamente a través de los servicios sanitarios o del personal sanitario". Al igual que este punto no se cumple, asegura Hernández, ", que juega al engaño, haciendo incluso creer a las madres que la leche artificial es lo mejor".
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POLVO DE ESTRELLAS

Virginia Johnson: la pionera de la terapia sexual


Virginia Johnson, investigadora sexual
Virginia Johnson murió esta semana, a los 88 años.
Puede parecer sorprendente en estos días en que los programas de televisión exploran los extremos del comportamiento sexual, en el que ningún tema está fuera de los límites, pero hubo días en que lo que ocurría en el dormitorio se mantenía firmemente a puertas cerradas.
Eso cambió en parte gracias al trabajo de Masters y Johnson, los investigadores estadounidenses -y más tarde marido y mujer- que llevaron a cabo experimentos sexuales a gran escala.
La mitad de esa famosa pareja, Virginia Johnson, murió esta semana, a los 88 años.
Ella era una madre divorciada dos veces, en sus treintas, cuando buscó trabajo en la Universidad Washington en St. Louis para mantener a su joven familia mientras obtenía un título universitario, a finales de la década de 1950.
Pronto se convirtió en asistente del ginecólogo-obstetra William Masters y más tarde en su pareja y colaboradora en experimentos de sexualidad humana a gran escala.
Publicaron dos de los libros más vendidos sobre comportamiento sexual, La respuesta sexual humana, en 1966 e Incompatibilidad sexual humana en 1970.
Johnson y Masters casaron en 1971, pero se divorciaron veinte años después. William Masters murió en 2001.

"Se rompió el silencio"

Susie Quilliam, psicóloga y autora de una versión actualizada de El placer del sexo (Joy of Sex), dijo a la BBC que la doctora Johnson "fue extremamente importante".
"Ella ayudó a romper el silencio y trajo conocimientos científicos sobre la sexualidad"
Susie Quilliam, psicóloga
"Ha habido estudios antes -el informe Kinsey- pero Virginia Johnson fue la primera mujer que se adentró seriamente en la investigación científica en esta área".
"Puso una perspectiva femenina a la obra William Masters. Ella ayudó a romper el silencio y trajo conocimientos científicos sobre la sexualidad".
Quilliam dijo que a las personas les daba "risita" al hablar de la terapia sexual pero aseguró que Masters y Johnson habían ayudado a darle respetabilidad a ese campo.
"Ellos realmente miden lo que llamaron la incidencia sexual en el laboratorio -10.000 ‘incidentes sexuales’ y alrededor de 700 personas. Fue la primera vez que algo así se hizo".
Paula Hall, psicoterapeuta sexual de Relate, dijo: "Masters y Johnson eran absolutamente críticos. Lo que hicieron fue para desmitificar el sexo y los problemas sexuales".
"Y ellos lo legitimaron de alguna manera haciéndolo científico. Ellos lo vieron como algo muy importante y tomaron los problemas sexuales seriamente como parte de la vida de las personas".
Y agregó: "Lo que fue realmente innovador fue lo mucho que se habló de la pareja y la función sexual de la mujer".

En el dormitorio

Virginia Johnson y su marido William Masters
Los investigadores estadounidenses llevaron a cabo experimentos sexuales a gran escala.
Su técnica consistía en primero preguntarle a la gente sobre su historia sexual y comprobar que no había causas físicas para el problema.
El paciente luego pasaba a tratamientos especialmente diseñados para ayudarles a superar su problema particular.
Los investigadores comprobaron el ritmo cardíaco, la actividad cerebral y el metabolismo durante la actividad sexual.
Su trabajo ayudó a las personas que estaban experimentando problemas como eyaculación precoz, impotencia y otras formas de disfunción sexual.
Robert Kolodny, que estudió con Masters y Johnson en la década de 1960 y más tarde se convirtió en un investigador y director de entrenamiento en su instituto, dijo que Johnson fue única en el campo de la investigación sexual.
"Recibió muchos premios y es ampliamente reconocida como una de las mujeres más importantes de la ciencia en el siglo XX".
Kolodny, que escribió 14 libros con la pareja, dijo: "Cambió muchas vidas a su alrededor".
Paula Hall aseguró que, mientras el descubrimiento de medicamentos como el Viagra para la disfunción eréctil había cambiado la forma en la que se abordan los problemas sexuales ahora, la obra de Masters y Johnson había sentado las bases de la terapia sexual tal como lo está hoy.
"Nos dieron una muy buena base sólida. Ha crecido y se ha diversificado desde esa base".

que lindo es pasear al aire libre en bici


Bicicletas con vibrador incorporado

"Irse y venirse" en bicicleta será la nueva tendencia sexual con el Happy Ride, una banqueta que tiembla a medida que pedeleás. Aunque está diseñado para mujeres, aseguran que también lo pueden disfrutar los ciclistas varones. Se recomienda no usar durante un congestionamiento.

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Happy Ride, es un accesorio erótico para bicicletas ofertado en un local sex shop británico, que revolucionará los paseos en bicicleta.
Se trata de un vibrador que se oculta discretamente en una funda lavable pegada al asiento de la bicicleta; un pequeño bolsillo que queda en la parte trasera del asiento. Contiene la unidad de control y dos pilas AA que hacen funcionar el aparato.
Aunque el vibrador está diseñado para adaptarse a la anatomía femenina, es igualmente disfrutable para los ciclistas varones, según indican sus creadores.
El ejercicio nos hace felices, pero con un incentivo como este, es muy seguro que las ciudades del mundo se llenen de ciclistas al borde del placer. Irse y venirse en bici será la nueva tendencia sexual.

 
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PARA QUE SE TE SIGA PARANDO

Cómo conservar la forma: los secretos de la libido masculina

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La vejez es una etapa vital marcada por un notorio abandono de la actividad sexual debido al descenso de la libido y la aparición de problemas sexuales. La disfunción eréctil afecta a uno de cada dos hombres mayores de 50 años y se generaliza en el grueso de la población a partir de los 70. Los cambios biológicos en el organismo, como la disminución del flujo sanguíneo y del oxígeno en los genitales o la insuficiente segregación de testosterona son los principales responsables de esta pérdida de la virilidad masculina, pero no los únicos.
Para el reputado cirujano cardiovascular Ronald Virag, famoso por haber sido el pionero en el desarrollo de tratamientos contra la disfunción eréctil, la actitud y el estado anímico son otros factores igual de importantes para explicar esta pérdida del deseo sexual, como explica en su último ensayo Erection, the user's guide (Editions Clément). El estrés, las preocupaciones, los cuadros depresivos, la medicación excesiva (especialmente de antidepresivos), el sedentarismo y los estilos de vida poco saludables en general tienen una gran influencia en la pronta aparición de las disfunciones sexuales, que afecta a uno de cada diez menores de 30 años.
La prolongación del deseo sexual durante el envejecimiento es un objetivo complejo, pero posible, según apunta Virag. Para ello es necesario compaginar los tratamientos médicos, que frenen las causas biológicas de la pérdida de la libido, con la incorporación de hábitos de vida saludable. Un propósito que no responde únicamente al mero hecho del disfrute de las relaciones sexuales, sino a los beneficios para la salud derivados de éstas.
Los beneficios para la salud del sexo en la vejez
Uno de los estudios recientes que insiste en esta tesis, publicado en el Journal of American Medical Association, concluye que la actividad sexual regular aumenta la esperanza de vida, reduciendo el riesgo de infarto y de desarrollar otras enfermedades respiratorias, hipertensión, arterioesclerosis y colesterol. En la bibliografía de Virag sobre esta cuestión también se citan diversos estudios que vinculan la práctica de sexo con una serie de beneficios para la próstata y el corazón.
El psicólogo David Weeks, antiguo jefe de geriatría del Royal Hospital de Edimburgo, presentó recientemente una investigación en un congreso en la que concluía que el sexo puede marcar una diferencia sustancial en nuestro bienestar y nuestra apariencia física. Tanto es así, que la práctica regular del sexo nos hace aparentar entre cinco y siete años menos.
Más allá de los tratamientos médicos popularizados por Ronald Virag para combatir las disfunciones sexuales, este cirujano francés recomienda tener en cuenta una serie de factores que contribuyen a despertar la libido y evitar las disfunciones eréctiles.
La calidad y la cantidad del sueño (y las erecciones nocturnas)
Dormir las horas suficientes es fundamental para mantener intactas las funciones del organismo y reparar todas las células del cuerpo, incluyendo los genitales. Además de la cantidad, también es importante la calidad del sueño, que se relaciona con las beneficiosas erecciones nocturnas. Cuanto más habituales sean más facilidades se tendrán para alcanzarlas durante el día. Esto es porque los tejidos de los genitales recuperan su vitalidad y se produce la regeneración tisular necesaria para que el pene funcione correctamente. Como el pene pasa mucho tiempo en estado de flaccidez, con baja oxigenación, estas erecciones automáticas son buenas para seguir teniéndolas cuando se desee, pues cuantas más veces se rellene el pene de sangre, mejor funcionará cuanto tenga que hacerlo.
La importancia de la relajación
Los nervios y el estrés pueden arruinar el acto sexual. Cuando un hombre se preocupa demasiado por su rendimiento sexual por el miedo a no estar a la altura se desencadena un círculo vicioso que provocará un gatillazo o bloqueará la erección. Cuantas más experiencias de este tipo se tengan, más se tratarán de evitar conscientemente las relaciones sexuales, aumentará el miedo y se acabará desplomando la libido. La falta de deseo conduce inevitablemente a un descenso de la segregación de testosterona, que es crucial para alimentar el apetito sexual.
El cuidado de la próstata
Uno de cada diez españoles desarrolla cáncer de próstata a lo largo de su vida, el cual afecta a la salud sexual. La próstata produce dos tercios del líquido seminal que, con las células de esperma, forman de semen. Como resultado de ello, la glándula que rodea la uretra presiona sobre ella interrumpiendo el flujo de orina y la eyaculación. Además, la glándula está recubierta por dos haces de nervios que son vitales para mantener una erección.
El cuidado de la próstata, por lo tanto, es muy importante. Por ello es importante evitar el tabaquismo, tener una actividad sexual regular y mantener un peso saludable.
Los periodos de descanso
La libido masculina puede tardar varias horas o incluso días hasta volver a alcanzar su punto álgido tras una eyaculación. Se trata de un período llamado fase refractaria. Mientras tanto, las endorfinas causan una sensación de calma y euforia al mismo tiempo. Hay que ser conscientes de que la fase refractaria dura más tiempo a medida que envejecemos, pues el cuerpo tarda más en limpiar las sustancias químicas y volver a segregar óxido nítrico. Si para un adolescente puede ser suficiente una espera de cinco minutos, para una persona mayor de 70 años se puede llegar a necesitar hasta una semana, aunque lo normal es que sean dos o tres horas.