jueves, 6 de julio de 2017

¿Y si los árboles se comunicasen entre ellos?

Todo lo que nunca te habrías imaginado sobre los bosques


¿Redes sociales en los bosques? Sí, así lo propone Peter Wohlleben en su libro ¨La vida secreta de los árboles", que volvío a poner los árboles en el centro de atención el año pasado. El autor de este libro creció en las decádas de los 60 y 70 en la ciudad de Bonn, pasando una gran cantidad de tiempo al aire libre. Tras realizar sus estudios en silvicultura, empezó a trabajar para el estado Alemán en tareas de pulverización y eliminación de árboles viejos en la zona de Colonia. Esta actitud destructiva hacia los bosques le hizo replantearse su perspectiva sobre los mismos.
Con el tiempo, empezó a observar los comportamientos de los árboles y halló interesantes características. Se dió cuenta de que los árboles funcionan mucho más como entes sociales que como agentes individuales: los árboles trabajan en redes y comparten recursos para así aumentar su resistencia. Basado en sus propias observaciones y en investigaciones científicas conocidas desde hace tiempo por los biológos, Wohlleben afirma que los árboles son seres sociales capaces de contar, aprender y recordar. Son también capaces de cuidar de árboles vecinos enfermos, así como alertar de peligros através de una red fúngica ("red de micorrizas") conocida como ¨Wood Wide Web".
[...] separarlos demasiado puede desconectarlos de sus redes comunales, disminuyendo así ciertos mecanismos innatos de resiliencia

 

Por razones aún desconocidas, también son capaces de mantener vivos durante siglso los restos de árboles ya caídos, alimentándolos a través de las raíces con una solución de azúcar.
En las plantaciones artificales de Alemania, tradicionalmente se deja espacio entre los árboles cuando se plantan para asegurar así que obtengan la cantidad adecuada de luz y crezcan más rápido. Se ha visto, sin embargo, que separarlos demasiado puede desconectarlos de sus redes comunales, disminuyendo así ciertos mecanismos innatos de resiliencia. Este hecho llamó la atención de Wohlleben y le hizo interesarse por aproximaciones alternativas a la silvicultura. Esto le llevó a montar proyectos alternativos para el mantenimiento de los bosques, principalmente para reducir la tala descontrolada, y propuso iniciativas cómo cambiar maquinarias pesadas de tala por caballos para no dañar el suelo de los bosques.
 
Cuando la municipalidad le concedió el permiso para llevar al cabo sus proyectos, Wohlleben empezó a dejar crecer el bosque de una manera más salvaje, parando la utilización de insecticidas e introduciendo caballos para la tala. Esto se tradujo pronto en ganancias, debido a la disminución del coste que suponía la maquinaria y los pesticidas sustituidos.


Todas estas experiencias le llevaron a la publicación de su libro, cuyas afirmaciones han sido puestas en duda por algunos biológos. Su claro lenguaje antropomórfico crea confusiones, por ejemplo decidr que los árboles "hablan" en vez de comunicarse, o decir que ¨amamantan a sus hijos", hace pensar que los árboles tienen emociones casi humanas. Aunque son seres increiblemente complejos, cómo asegura el doctor Richard Fortey, no son Ents.
Árboles Inteligentes (Trailer) from Dorcon Film on Vimeo.

LA POBREZA AFECTA EL CEREBRO

Cómo es la imagen de las conexiones cerebrales más detallada hasta el momento y para qué sirve


Su nivel de detalle no tiene precedentes: muestra cómo viaja la información en el cerebro y cómo se hacen más denso o fino su "cableado".
La innovadora tecnología para escanear el cerebro y ver sus conexiones internas fue desarrollada por científicos de la Universidad de Cardiff, en Reino Unido, y permite ver las fibras que transportan todos los procesos de pensamiento.
Fergus Welsh, especialista en salud de la BBC, se sometió al escáner y las imágenes de este video son de su propio cerebro.
Lo extraordinario, explica Welsh, es la capacidad de este escáner de variar su campo magnético rápidamente de acuerdo a la posición.
Esto supone que los investigadores pueden hacer un mapa de las conexiones –llamadas axones- con tal nivel de detalle que harían falta 50 de estas fibras para alcanzar el grosor de un cabello humano.
El método se utiliza para investigar muchas enfermedades neurológicas como esclerosis múltiple, esquizofrenia, demencia y epilepsia.
Los médicos esperan que ayude a comprender mejor enfermedades neurológicas y que se utilice en lugar de las biopsias invasivas.