martes, 10 de diciembre de 2013

¿Y SI EL ENFERMO SE CREE QUE CURA Y SE SIENTE MEJOR,QUE ES?

Si no es eficaz, no es medicamento

Tres médicos lanzan la campaña online #nosinevidencia contra la regulación de la homeopatía

Más de 20 blogs sanitarios se han adherido a la iniciativa que pide exigir eficacia demostrada

    .

."La orden que regulariza los homeopáticos contiene afirmaciones 
que atacan a la razón científica: medicamentos sin indicación
 terapéutica y medicamentos que no tienen que demostrar eficacia.
 Eso no es un medicamento. Queremos desmontar las pseudociencias en 
medicina", dice Vicente Baos, médico de familia en Collado Villalba (Madrid) 
y uno de los tres impulsores de una campaña online que pide al Ministerio
 de Sanidad que no apruebe ningún medicamento sin haber comprobado 
antes su eficacia. La campaña 'No sin evidencia', o #nosinevidencia en
 forma de hashtag de la red social Twitter, se ha lanzado esta 
noche y ya cuenta con la adhesión de 26 de los blogs sanitarios
 más leídos de Internet.
La publicación, la semana pasada, de un borrador de orden 
ministerial que prepara el terreno para autorizar miles de productos homeopático
sha incendiado las redes sociales. Estos preparados se venden ahora en 
las farmacias gracias a una disposición que se pensó como transitoria 
pero que dura dos décadas. El Ministerio de Sanidad pretende
 autorizarlos siempre que cumplan requisitos similares a los de los
 medicamentos: calidad, seguridad y eficacia. Y ahí está el problema: 
no está previsto exigirles que demuestren su eficacia mediante 
ensayos clínicos, como ocurre con los medicamentos al uso. 

La campaña 'No sin evidencia' incluye un manifiesto que, 
entre otras cosas, pide a Sanidad que no apruebe ningún 
tratamiento que no haya demostrado "mediante ensayos
 clínicos reproducibles, unas condiciones de eficacia y seguridad
 al menos superiores a placebo". "La regulación de unos supuestos 
medicamentos homeopáticos sin indicación terapéutica es una grave
 contradicción en sí misma y debe ser rechazada. Si no está indicado
 para nada ¿para qué hay que darlo?", se pregunta.
Los impulsores de la campaña también pretenden "presionar" 
a los colegios de médicos para que se pronuncien sobre lo que
 Baos considera "prácticas no científicas" de algunos médicos. 
"Los Colegios de Médicos incluyen secciones de "medicina alternativa" 
y el código deontológico dice que un médico no dará terapias sin
 eficacia y seguridad", señala. De hecho, uno de los puntos del 
manifiesto pide a la Organización Médica Colegial (OMC) que,
 "en cumplimiento del artículo 26 del Código de Deontología Médica
, desapruebe a los facultativos que prescriban tratamientos sin evidencia
 científica demostrada". 



De acuerdo compañeros,
porque no se ponen asi 
de firmes con los 
labos de la farmaffia,con
la OMS que inventa 
enfermedades y sus vacunas.
Si combaten a
 todos los negocios,
cierren todas las
 consultas privadas y
 acaban de un tajo con 
la corrupcion.




Cuatro años de cárcel para el 

creador de las prótesis

 mamarias PIP

Los implantes fraudulentos han afectado a más de 85.000 mujeres en todo el mundo


El Tribunal Correccional de Marsella, en el sureste de Francia, condenó este martes a cuatro años de cárcel a Jean-Claude Mas, fundador de la empresa PIP que inventó y fabricó unos implantes mamarios fraudulentos que afectaron a más de 5.000 pacientes en Francia y 80.000 en el mundo.
Mas, de 74 años, fundó en 1991 la empresa Poly Implant Prothèse (PIP), convertido en el cuarto fabricante mundial de prótesis mamarias gracias a sus implantes de bajo coste fabricados con un gel no homologado por las autoridades. Las prótesis PIP, de silicona cohesiva, se ofrecieron a precios más baratos que las de simple silicona.
El Ministerio de Sanidad recomendó el pasado octubre la extracción de los implantes mamarios PIP (Poly Implants Prothèses), tres años después de retirarlos del mercado por estar fabricados con un gel diferente al declarado y porque presentaban un mayor riesgo de rotura. Francia solicitó hace dos años a más de 30.000 portadoras que pasaran por el quirófano para retirárselos.
El acusado fue condenado, además, a una multa de 75.000 euros, frente a los 100.000 reclamados por la acusación, y a la prohibición de ejercer una profesión en el terreno sanitario o médico. Además del creador de las prótesis PIP, el Tribunal condenó a otros cuatro trabajadores de la empresa a penas de entre tres años de cárcel, con dos exentos de cumplimiento, y año y medio de prisión sin cumplimiento.

PROCESO DE ENGAÑO

Todos ellos han sido considerados culpables de haber puesto en marcha un proceso para engañar a las autoridades sanitarias francesas y poder fabricar en su planta del sureste francés prótesis con un gel no homologado, derivado de una silicona industrial diez veces más barata que la de sus competidores, lo que les convertía en las más competitivas del mercado.
Hasta su prohibición en 2010, poco después de que se multiplicaran los incidentes con las prótesis mamarias PIP, la acusación estimó que la empresa se ahorró un millón de euros anuales en gastos de fabricación. PIP llegó a obtener el 84 % de su facturación fuera de Francia, esencialmente en América Latina, donde en países como Venezuela se estima que 33.000 mujeres fueron operadas para implantarles esas prótesis.
Pese a las acusaciones de fraude, durante el juicio Mas confesó utilizar una silicona industrial, pero afirmó que sus prótesis no tenían ningún riesgo sanitario y acusó a las mujeres que lo llevaron ante los tribunales de ser "frágiles" y de pretender "sacarle el dinero".
Un dinero que asegura que no tiene, porque, según explicó en la audiencia, el cierre de su empresa le dejó en la ruina, algo que los abogados de las denunciantes consideran falso, por lo que han pedido que se investigue la posibilidad de que tenga fondos ocultos en paraísos fiscales. En el ojo del huracán también está ahora la empresa alemana Tüv, que durante años certificó las prótesis de PIP pasando por alto que estaban fabricadas con un gel no homologado.