jueves, 6 de diciembre de 2012

La resaca es peor cuando se combina alcohol y tabaco


Con el mismo número de copas, los que fuman mucho tienen más posibilidades de desarrollar una resaca o sufrirla de forma más intensa, según un estudio

La resaca es peor cuando se combina alcohol y tabaco

La resaca, esa combinación de dolor de cabeza, náuseas y fatiga después de una noche de mucho alcohol, puede ser aún peor si hemos abusado también del tabaco. Así lo asegura un estudio norteamericano que se publicará en la edición de enero de «Journal of Studies on Alcohol and Drugs».
«Tomando el mismo número de copas, las personas que fuman más de lo normal tienen más posibilidades de desarrollar una resaca o sufrirla de forma más intensa», ha señalado el investigador Damaris J. Rohsenow, doctor del Centro de Estudios en Alcohol y Adicciones de la Universidad de Brown, en Rhode Island (EE.UU.).
Los investigadores encontraron que los estudiantes universitarios eran más propensos a padecer síntomas de resaca tras una noche en la que habían ezclado alcohol y tabaco. Para llegar a esta conclusión, realizaron una encuesta online a 113 estudiantes que reprotaron, durante ocho semanas, su consumo de alcohol y tabaco y cualquier síntoma de resaca. En general, cuando los estudiantes bebían mucho -el equivalente a cinco o seis latas de cerveza en una hora- los que habían fumado más ese mismo día tenían mayores probabilidades de sufrir una resaca a la mañana siguiente y que fuera más dolorosa.
Pese a que el porqué de este fenómeno no está todavía muy claro, Rohsenow ha citado otra investigación que demostraba que los receptores de nicotina en el cerebro están involucrados en la respuesta subjetiva a la bebida. Fumar y beber al mismo tiempo aumenta la liberación de dopamina, un neurotransmisor del cerebro responsable de hacer que el cuerpo se sienta relajado. El hecho de que la nicotina y el alcohol están conectados en el cerebro puede explicar por qué fumar está ligado a la resaca.