miércoles, 2 de marzo de 2016

"La vacuna del meningococo B debería ser gratuita"

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Una niña, durante una campaña de vacunación infantil.

Nuestro hijo de 6 años fue dado de alta del Hospital de Terrassa después de haber padecido una enfermedad meningocócica, cuya evolución ha sido favorable y no ha dejado secuelas. No obstante, podría haber sido todo lo contrario, y estar llorando su pérdida o bien haberse quedado con alguna minusvalía.
La enfermedad meningocócica tiene una elevada mortalidad (hasta el 10%) y un elevado número de secuelas en los supervivientes (amputaciones, convulsiones, sordera…). Está producida en casi el 80% por el Meningococo Serogrupo B. En la actualidad y después de arduos estudios, se ha conseguido una vacuna eficaz frente a este germen, vacuna que se aprueba para su utilización en España por parte del Ministerio en agosto del 2014. Se trata de la vacuna Bexsero (Laboratorios GSK), que durante más de un año Sanidad restringió solo para uso Hospitalario y para casos muy concretos.
Tras varias solicitudes y peticiones por parte de pediatras, comité de vacunas y otros profesionales, finalmente se autoriza la compra particularen las farmacias españolas en octubre de 2015. Se indica para todos los grupos de edad, pero no está financiada. A pesar de su coste económico (más de 100 euros por dosis), los pediatras y los padres, considerando lo importante de la prevención de esta grave enfermedad, empezaron a vacunar a los niños frente al meningococo B.
¿Qué ha pasado? Que al cabo de menos de dos meses de iniciar las vacunaciones ya no hay vacunas en el mercado, y es imposible seguir vacunando a los niños.
¿Qué tipo de previsiones han hecho el Ministerio de Sanidad y el Laboratorio fabricante de la vacuna para que la alegría de disponer de una vacuna nueva y efectiva nos durara dos meses?
¿Cómo es posible que una vacuna que puede salvar la vida de un niño no esté cubierta por el sistema de salud pública?
Ruego y solicito a quien tenga competencia en ello que resuelvan rápido este problema, y podamos proteger a nuestros niños, para que no se repitan más casos de esta terrible enfermedad que pudo costarle la vida a mi hijo
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